Una mesa renovada ORIGINAL Y FÁCIL DE HACER

TALLER DE RECICLADO

Por su peculiar altura, esta mesa había caído en el olvido. En CARPINTERÍA MAYOR la hemos reformado cambiándole la encimera y cortando las patas.

Por anticuado o en desuso que esté un mueble, siempre será una buena ocasión para poner en práctica nuestro afín reciclador. Ya sabes que sólo se trata de echarle imaginación y descubrir las posibilidades que encierran muchos de los objetos que nos rodean. Dando a esta mesa un tamaño y un acabado nuevos, le hemos otorgado una nueva vida.

ANTES...
Esta mesa costurera era difícil de ubicar en la vivienda; su altura era inadecuada y necesitaba un nuevo "look". La transformación, a continuación, es perfecta.

DESPUÉS... De estilo romántico pero sin estridencias, nos encontramos ante un mueble totalmente renovado.

Serrar las patas y aplicar una veladura

1 Empezamos la transformación por la estructura de las patas. Su deterioro era muy superficial, pues sólo afectaba al aspecto del barniz, mal aplicado y lleno de arañazos. La estructura estaba firme, y la unión de las patas con el bastidor, totalmente consolidada.

2 Con un serrucho, serramos las patas de la mesa para adecuar su altura a su nueva función como mesa auxiliar de centro. Sujeta bien el mueble sobre el banco de trabajo para que no te tuerzas ni te dañes al cortar las patas.

3 Para darle un nuevo acabado a la mesa, es necesario retirar por completo el viejo barniz. Ayúdate con la lijadora, y, ya de paso, sanea la superficie de arañazos y golpes poco profundos. ija hasta dejar al descubierto la madera virgen.

4 Después de limpiar el polvo ocasionado por el lijado del barniz, ya podemos aplicar la pintura. Para el acabado hemos elegido una emulsión acrílica mate de color blanco.

5 Le darás ese aspecto desvaído a la pintura si retiras el exceso de ésta con un trapo. De esta forma, la bonita veta de la madera no queda oculta bajo la emulsión, pero proporcionarás una necesaria protección a la madera.

Una nueva tapa decorada con plantillas

A diferencia de la estructura de las patas, de madera maciza, la antigua tapa de la mesa consistía en un tablero de aglomerado chapado. Por su mal estado baja calidad, no merecía la pena ser restaurado.

6 Con madera maciza de pino realizaremos una nueva tapa. Puedes adquirirla en una carpintería o centro de bricolaje, o mandar que te lo preparen a la medida encolando varios tablones. Fijamos la nueva tapa a la base utilizando los mismos puntos de anclaje en los que se atornillaba la antigua. Si la tapa es de madera maciza, conviene que quede bien fijada a la estructura por todos sus lados.

7 Para unificar el conjunto, damos a la tapa el mismo acabado de pintura que dimos a la estructura de las patas. Si aplicas la emulsión ligeramente aguada, conseguirás el mismo aspecto desvaído y se apreciarán las vetas de la madera.

Así se hacen las plantillas para estarcir 

Para decorar la nueva tapa hemos utilizado un recurso que ya conoces, y que da excelentes resultados.

Con una plantilla para estarcir, hemos llenado toda la superficie de la tapa con un mismo motivo de flores.

Al utilizar un solo color, el gris, para estarcir las flores, hemos dado a nuestra mesa un renovado y muy actual aspecto, ya que este esquema monocromático que recuerda al efecto tatuaje está de plena actualidad en la decoración. La plantilla, realizada con acetato (plástico transparente) nos permite ver el fondo de la mesa y los dibujos ya estarcidos, para así poder colocarla bien en las sucesivas aplicaciones de pintura.

8 Para realizar la plantilla, hemos utilizado un dibujo ampliado en la fotocopiadora, lámina de plástico transparente en tamaño DIN-A3, rotulador permanente y un cúter bien afilado.

9 Con rotulador permanente, calca el dibujo para transferirlo a la lámina de plástico. Si el motivo es grande, necesitarás una lámina lo suficientemente amplia como para abarcar el dibujo en su totalidad.

10 Con una cuchilla o el cúter, recorta las partes internas del dibujo. Como sólo utilizaremos un color, bastará con preparar una sola plantilla. Procura no seccionar los "puentes" entre recortes.

11 Coloca la plantilla sobre la tapa y rellena los huecos con pintura acrílica color gris. Para no tapar la veta, aplicaremos la pintura con una pequeña esponja embebida en muy poca cantidad de producto.